Un rato libre, en segundo da para mucho [Sergio] (+18)

Recuerdo del primer mensaje :

Aquel día no me apetecía salir al patio. Estaba un poco vago posiblemente sí, pero es que anoche no habia conseguido pegar ojo en toda la noche anterior, no sabía el porqué y era algo que me interesaba... ¿Por que cojones no habia podido dormir despues de lo que habia pasado en el Retiro? Bueno a tomar por culo, patada hacia adelante y vivir la vida que para eso está, ¿no? El caso es quqe estaba solo en mi clase, de modo que decidí optar por avanzar un poco con física y el movimiento ondulatorio armónico, no me molestaba para nada el empollar un poco más, me subi al pollete de una ventana con la calculadora y el libro de física. Mordía mi pilot buscando una respuesta cuando vi la puerta de mi clase abrirse, no reconocía quien entraba

-¿Quien

La mesa estaba algo fría, pero a penas lo notaba por el calor que tenía yo. Besaba los labios de él cuando podía, entre gemido y gemido, los cuales por supuesto seguía intentando contener lo máximo posible. Su cuerpo contra el mío hacía bastante difícil el movimiento, pero daba exactamnte igual, se sentía bien tenerlo tan cerca. Me mordí el labio nuevamente, dejando ir algún jadeo más. -Y yo de que lo hagas.- Mi voz sonó lo más sugerente posible teniendo en cuenta que me costaba hablar con claridad debido a la respiración agitada.

Creo que los dos estábamos ahora mismo más que calientes, maldita sea no entendía que cojones me estaba pasando. ¿Por qué me ponía ese niñato el rabo tan duro? Supongo que porque eramos iguales, dos tíos hechos y derechos amantes del deporte que disfrutaban follando como locos.

Me lancé a su cuello que mordi con fuerza, succionaba su piel con ansias de hacerle un chupeton. Mi cuerpo hacia que le pegase embestidas en su próstata

Un gemido, más parecido a un gruñido que a un gemido pero bueno, salió de mi boca al sentir como mordía mi cuello. Claramente me iba a dejar marca, pero tampoco es como si me importara. Apostaba a que la mayoría de la gente culparía a cierta rubia de esto y no a Cabano. Aunque sinceramente podría ser de cualquiera. Gemí con intensidad notando la velocidad que el castaño aumentaba, estaba deseando sentir como se corría de una vez. Estaba muy excitado y todo lo demás había desaparecido en cuanto comenzó el polvo. Solo estaba centrado en eso y el tío cuya polla me estaba follando al parecer también sentía lo mismo.

Mi cuerpo estaba muy caliente, y mi cintura se movía con vida propia y me refiero al ritmo. Ahora mismo ya no pensaba en otra cosa que no fuese en salir y entrar de su cuerpo como un loco, no me paraba a pensar si le estaba haciendo daño no era mi culpa, es solo que bueno me había excitado de sobre manera y claro que no podía parar. El caso era que notaba como el cuerpo de Sergio me apretaba mi miembro cada vez más y más y yo evidentemente, tenia que empujar con la misma fuerza para abrirle

-Te juro que si tu culo me sigue apretando mi miembro así, me correre muy pronto... y no sé si quiero correrme aún, prefiero verte jadear por mi y por mi polla, y por cierto te regalaré un pañuelo

Los gemidos salían de mi boca sin ningún control. Al mismo tiempo que mi cuerpo se movía contra el suyo con intensidad. Contengo mis gemidos todo lo que puedo. Mordiéndome el labio y esperando a que se corriera dentro de mi de una vez. Apretaba mi cuerpo levemente solo para sentirle más. Lo que me hacía gemir más alto. Me seguía mordiendo los labios para que no sonara demasiado alto, terminaría por hacerme sangre pero no era consciente de ello en ese momento. -Correte ya...- Pedí entre gemidos. No nos quedaba demasiado tiempo y quería aprovechar al máximo.

Respiré de manera exagerada, ¿para qué? Pues muy sencillo, quería coger mucho aire para poder dar un gran gemido y grito y correrme así en condiciones. Mantuve el aire en mi cuerpo, de modo que lo podía almacenar y cuando sentí una gran presión en la zona de mi cadera y mis testículos. Tuve que soltar todo el aire de golpe al correrme, grité el nombre de Sergio con fuerza mientras notaba como su interior se estaba llenando lentamente de mi semen, me volvi a tumbar sobre él abrazandole por el cuello sonriendole desnudo

-Bueno, ¿que tal lo he hecho? Por lo que veo has quedado bastante feliz y de puta madre, ¿no? Nos quedan dos minutos, si quieres puedo comerte la boca o algo, lo que quieras

Sonrei esperando su respuesta

El movimiento siguió. Yo a penas podía ver los movimientos de Cabano, pero si los sentía y muy bien. Un gemido tan fuerte como el suyo salió de mi boca cuando comenzó a correrse dentro de mi, le sentía muy caliente dentro. Gemí su nombre entre varios jadeos y palabras sin sentido. Mi respiración se mantenía aun agitada cuando se medio tumbo sobre mi. -Muy bien.- Afirmé sonriendo cuando preguntó como lo había hecho. Pasé las manos por su cuello para pegarlo a mi y darle un morreo intenso en los labios. -Creo que es mejor que nos vistamos. Me tengo que ir a clase.- Pues el timbre, tal como él había dicho, estaba a punto de sonar.

Sonreí y me puse la ropa, no tardé mucho en darle otro morreo ya con la ropa puesta, mi lengua jugaba en su boca con la suya. Me acerque a su oido para susurrar con una voz bastante ronca y varonil, la que me quedaba despues de echar un polvo... siempre me pasaba lo mismo

-Tienes mi número, ¿no? si estás caliente y te apetece repetir... me llamas y ya buscamos un sitio donde quedemos, ¿de acuerdo Sergio?

Cuando Cabano se bajó de la mesa pude hacer lo mismo y vestirme. Por suerte llevaba un polo y el cuello me cubría el chupetón que me había hecho. Seguí de nuevo su beso. -Claro, lo tengo.- Sonreí de lado guiñándole un ojo mientras cogía mi cazadora. -Te llamaré.- Afirmé, ya que seguramente lo haría. Precía que habíamos tomado el tiempo justo, ya que sonó el timbre en ese momento. Salí de la clase cruzándome con otros chicos de su clase y me fui hacia mi aula antes de que el profesor llegase.